Gestión del Conocimiento y Gestión de conocimiento en red: una distinción no sólo metodológica
Luís Ángel Fernández Hermana - @luisangelfh
30 mayo, 2013
Un error que se comete frecuentemente, que tiene una fecha precisa de nacimiento, procede de la confusión que se ha producido entre gestión del conocimiento (GC) y gestión de conocimiento en red (GC-Red). Hasta 1996, ambas marchaban por sus respectivos caminos. Una, la GC, que bebe directamente de la Administración de Empresas, quizá con una mayor precisión respecto a la definición y conceptualización de su ámbito, sus funciones y sus objetivos, aunque escasa de éxitos. La otra, GC-Red, sostenida fundamentalmente por la amplísima tipología de comunidades virtuales que emergieron en Internet desde mediados de los años 80 del siglo pasado, buscando encontrar su sitio bajo el sol digital y, como no podía ser de otra manera, re-elaborando constantemente su ámbito de actividad, sus funciones, su estructura tecnológica y la capacitación asociada a estas innovadoras organizaciones diseñadas en función de sus objetivos.
A partir de 1996, con la irrupción tempestuosa de los servidores web en las empresas, se produjo una especie de choque de trenes. Lo que hasta entonces pertenecía estrictamente al ámbito de la empresa, la organización o la institución, sufrió un espectacular proceso de hibridación al llegarle Internet hasta las venas. Y todavía seguimos en el proceso de aclarar qué le corresponde al César y qué a la Red, dónde no es posible que se encuentren y dónde deberían complementarse, y cómo.
La GC es una disciplina que, como hemos señalado, procede de la Administración de Empresas desde los años 60 (Business Administration) y que existe independientemente de que haya red o no, sea del tipo que sea, abierta, cerrada, corporativa, local o sideral. Lo que necesita es que haya empresa, es decir, una organización que responda a un organigrama nítido, donde las funciones estén claramente delimitadas y los objetivos, tanto generales de la empresa, como los particulares de cada parte del organigrama, sean los que orienten su actividad y, por tanto, la cuenta de resultados de la que depende su supervivencia. Por tanto, la GC se asienta firmemente, en primer lugar, sobre la gestión desigual y combinada de recursos humanos, recursos materiales, recursos financieros, recursos de marketing y venta, recursos logísticos, etc., con el objetivo de cumplir con los intereses estratégicos de la empresa u organización. En otras palabras, la GC descansa sobre la gestión integral de la empresa (u organización en caso de que sea una institución o entidad del tipo que sea, pero con organigrama funcional).
La GC-Red, por el contrario, es una disciplina que procede del mundo de redes virtuales abiertas como Internet, donde, por principio, no hay una organización, sino que la crean los usuarios en función de sus intereses y los objetivos que fijan en cada caso. Nótese, de entrada, la naturaleza del choque de trenes: la GC-Red se asienta sobre organizaciones que crean los usuarios cuyo vínculo entre ellos no tiene ni porqué existir, ni presuponerse; la GC, sin embargo, se asienta sobre una organización que tiene empleados encuadrados en un organigrama que les asigna sus funciones y tareas. De las organizaciones creadas por los usuarios, con mayor o menor sujeción a sistemas de GC-Red, proceden los foros, las listas de distribución, las comunidades virtuales, las redes sociales, los medios sociales, en general, y las redes sociales virtuales de conocimiento, en particular.